Hola mi nombre es arturo, la vez pasada les conte como me cogio mi amigo Manuel, pues ahora les voy a contar otra experiencia que tuve unas semanas después, pero ahora con mi amigo de toda la vida Rafael, que es un año mayor que yo. Por aquellos dias Manuel estaba muy ocupado trabajando, por lo que apenas si nos veiamos a solas, por lo que una noche que estaba aburrido y solo en mi casa, y con unas ganas locas de sentir una verga en mi boca y en mi culo, le llame a mi amigo Rafael, para saber si podia venir a mi casa, el me dijo que es unos 10 minutos venia, por lo que me prepare para lo que iba a ocurrir, ya que yo sabia que le gustaba a el, pero como era mi mejor amigo nunca lo tome en cuenta. Pasado el tiempo tocaron el timbre y era el, se veia guapisimo, moreno, alto, ojos grises, y un cuerpo muy bien formado y sin dejar de lado su gran verga, que ya me moria por probar, pasamos a mi cuarto, y nos sentamos en la cama, y nos pusimos a hablar de cualquier tonteria, pero yo ya no aguantaba mas, asi es que sin pensarlo me lance a sus brazos, y le empeze a besar desesperado, mientras el me sujetaba con sus fuertes brazos, me sentia en la luna, le quite la playera y le empeze a besar el torso mientras el me agarraba las nalgas, fui bajando hasta llegar a su pantalón, y se lo desabroche dejando al aire su gran verga, era simplemente maravillosa, la empece a masajear con mis manos y lentamente me la fui metiendo a la boca, y la empece a chupar, solo escuchaba los gemidos de placer que el daba, después de un rato de estar mamandosela, se corrio en mi boca y trague hasta la ultima gota de su leche, pero la verga no disminuia de tamaño, por lo que Rafael me dio la vuelta, me quito el pantalón y el boxer, y empezo a masajear y a lamer mi esfintier, yo solo podia gritar de placer, pero aun no llegaba lo mejor, después de asegurarse de que mi ano ya estaba un poco dilatado, me puso de a cuatro patas, y lentamente me fue penetrando, al principio senti dolor, pero se empezo a convertir en un enorme placer, después de eso, me volteo, y me subio las piernas a sus hombros y me volvio a penetrar, cabe decir que esa postura me encanta, verlo a los ojos, y ver su rostro lleno de placer, asi continuamos un rato mas hasta que se volvio a correr llenando todo mi culo de leche. Nos quedamos un rato acostados, y abrazados en mi cama, hasta que un rato después volvimos a repetir la experiencia, recuerdo que lo hicimos dos veces mas, desde ahora en adelante Rafael se a convertido en mi segundo amante.
Si les ha gustado escribanme a mi correo es: [email protected], y si son de baja California, mexico, talvez nos podamos ver. ;)
El Autor de este relato fué Arturo , que lo escribió originalmente para la web https://www.relatoscortos.com/ver.php?ID=13482&cat=craneo (ahora offline)